Consumidas tradicionalmente en Asia, las semillas de cáñamo son un superalimento, un cereal que aporta mucha energía, al igual que la quinoa o el mijo.
Su sabor es suave similar a los frutos secos como la avellana.
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Las semillas de cáñamo se pueden emplear en multitud de recetas tanto saladas como dulces.
Es necesario pelarlas antes ya que tienen una cáscara dura y, a partir de ahí, las podemos añadir a yogures, tostar e incorporar a platos como ensaladas o aderezos.
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También sirven para hacer masa, para preparar pizzas, panes u otras recetas de repostería.
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Aquí una lista con sus Beneficios:
- ácidos grasos esenciales como el omega 3, ayudan a combatir problemas como el colesterol
- fibra, ayuda a regular el tránsito intestinal
- hierro, combate problemas de anemia
- calcio y fósforo, colabora con el buen estado de nuestros dientes y huesos
y el
- magnesio, regula el funcionamiento del sistema nervioso.
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Estas son nuevas formas de incorporar la naturaleza a nuestra alimentación.
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